Una de las cosas que me encantan es ir a los rastros, mercadillos y encontrarme utensilios y trastos viejos que la gente ya no quiere pero que yo les doy una segunda oportunidad así es que cuando ví esta maleta no lo dudé, la compré por muy poco dinero. Es de cartón y su estado estaba regular, mi intención era tunearla pero sin perder ese aire viajero que tienen estas maletas y que también me sirviera como elemento decorativo en casa, así es que la he hecho un lavado de cara muy sencillo pero que a mí me gusta el resultado final. Espero que a vosotros también.
Los pasos que he seguido:
- Limpiar el polvo y quitar suciedad de la maleta, pero con cuidado ya que al ser de cartón no podía mojarla ya que se me deshacía.
- Para cubrir los rayones del cuero le dí una mano de cera rústica, es una cera que tiene color y cubre los arañazos al igual que nutre la piel
- Las esquinas estaban descosidas y no se podían volver a coser, así es que cogí unos trozos de cuero que tenía por casa y los pegué a modo de remaches.
- Por último para decorar la maleta pegué unas postales antiguas que tenía por casa, forré el interior con papel adhesivo y estampé unos sellos de los de oficina: confidencial, recibido, etc. por toda la maleta para darle un aire vintage.
Este es el resultado final para una maleta que estaba pidiendo ser rescatada.
Buen finde a tod@s.
Recupero este post para compartirlo y enlazarlo con Olga, en Inventando el finde y con Marcela en finde frugal
Buen finde a tod@s.
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