El baúl es un elemento decorativo que no pasa nunca de moda, de hecho va pasando de generación en generación en las familias, acumulando historias y recuerdos. También soluciona problemas de espacio ya que caben dentro infinidad de objetos para los que no encuentras lugar.
Antiguamente se usaba para guardar la ropa o como maleta cuando se viajaba, este que yo he heredado lo usaban antaño así, a modo "maleta" para transportar los objetos en un viaje y yo, que me encanta tunear todo lo que pillo, lo he recuperado y personalizado, adaptándolo a la decoración de mi casa como mesa auxiliar.
El proceso que he utilizado ha sido muy fácil ya que he querido dejarlo con su aspecto y al ser de chapa tampoco tenía muchas opciones.
- Primeramente y como siempre una buena limpieza con agua caliente y jabón.
- Los listones que tiene de madera los lijé y barnicé con barniz color nogal.
- Las bisagras, cierres y adornos de hierro los pinté con pintura de forja
- El resto como es de chapa lo dejé tal cual.
- No tengo fotos del interior pero está empapelado, le cambié el que tenía por otro, también podéis poner papel adhesivo (aeronfix) o entelarlo, un poco más complicado pero también perfecto.
- Y listo para adornar cualquier rincón de la casa y por dentro ...a guardar ropa, libros, etc.