Esta semana os voy a enseñar lo fácil que es reciclar una puerta de armario para convertirla en un gran espejo para el recibidor, habitación, etc. Si tenéis pensado compraros un espejo pero son muy costosos y disponéis de un armario antiguo, guardado por ahí o algún conocido que vaya a vaciar su trastero os lo puede regalar no lo dudéis si os gusta este tipo de decoración. La pena que no tengo el antes ni hice fotos al proceso porque lo hice hace tiempo pero era una puerta de un armario antiguo, del de las abuelas que estaba muy bien conservado.
Debajo donde coloqué el espejo hay una puerta que esconde las llaves de paso del agua y para darle un aire distinto y más gracioso, hice un pequeño dibujo de un ratón.
Este fue el resultado:
de puerta de armario a espejo recibidor |
El proceso fue:
- Pasar una lija suave por la madera.
- Barnizar a muñeca con un barniz brillo. Necesitó dos manos.
- Para el recuadro interior pinté con esmalte blanco roto envejeciéndolo un poco con betún de judea y pintando los tornillos con marrón oscuro para resaltarlos.
- El marco central que está entre los dos marcos de madera estaba un poco feo, por lo menos a mí no me gustaba, así es que como tenía un retal de piel sintética sobrante, decidí recubrirlo. Primero hice un patrón con cartón para ver las medidas. Después lo puse sobre la tela y fui cortando y con mucho cuidado pegando con cola especial para textil procurando que no me quedaran burbujas y para eso hay que ayudarse de un trapo para ir presionando encima a la vez que vas pegando.
El resultado quedó muy bonito aunque hay que tener paciencia, si no deseáis complicaros con tela también podéis utilizar papel adhesivo o simplemente pintándolo.
La puerta que esconde las llaves de paso del agua estaba barnizada y no quise tocarla, pero para darle un aire un poco más gracioso, dibujé a mano un pequeño ratón. Utilicé pinturas acrílicas y pinceles finos.
os ha gustado la idea?